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COYUNTURA INTERNACIONAL
Desde una perspectiva internacional, el primer trimestre de 2009 registra, como ya decíamos arriba, la primera contracción global de la economía desde finales de la segunda guerra mundial. Aunque voces autorizadas, como la del Presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, apuntan a un final del periodo recesivo anterior a lo esperado, con un inicio de la recuperación a principios del próximo ejercicio, hay opiniones contrarias. Concretamente, el Fondo Monetario Internacional, en su reciente informe sobre Perspectivas de la Economía Mundial, de abril de 2009, recuerda que las recesiones asociadas a las crisis financieras suelen ser más largas y las recuperaciones más lentas y difíciles. Dado, además, el carácter global de la actual circunstancia, no cabe esperar sino que, desafortunadamente, la actual recesión sea “excepcionalmente larga y profunda y su recuperación lenta”. El mismo informe, por otro lado, señala que las medidas anticíclicas han mostrado en pasadas ocasiones su eficacia a la hora de acortar las recesiones y acelerar la recuperación, y apunta que ello es particularmente válido para las políticas fiscales expansivas.
En el camino apuntado por los expertos del FMI se avanzó, al menos parcialmente, en la cumbre del G-20 que se celebró en Londres los días 1 y 2 de Abril, y en la que los principales líderes mundiales acordaron, como una de las acciones de máxima prioridad, el impulso de una serie de paquetes fiscales expansivos sin precedentes y que se cifran, en total, en más de 5 billones de Dólares USA. A éstos se les añaden 1,1 billones que gestionará el FMI procedentes de diferentes aportaciones extraordinarias, y que estarán destinados a proporcionar soporte a las economías más débiles, junto a otras líneas de apoyo a la recuperación, y que gestionarán los bancos regionales de desarrollo y otras agencias.
Paralelamente a estas líneas de impulso, en la citada cumbre se pusieron las bases de una reforma del sistema financiero, promoviendo, entre otras medidas, la creación de un organismo dedicado a asegurar la estabilidad financiera mundial, mediante la implantación de un nuevo marco regulatorio y de gobernanza empresarial, así como la acción concertada contra aquellos países que no apliquen las normas bancarias internacionales, y contra los paraísos fiscales.
SITUACIÓN EN ESPAÑA
En lo que se refiere a la economía española, el continuado descenso de la demanda ha seguido empujando los valores del IPC a la baja, hasta valores ligeramente negativos, si bien la inflación subyacente ha permanecido en valores ligeramente positivos, lo cual, al menos de momento, aleja el temido fantasma de la deflación. El desempleo ha seguido aumentando, llegando hasta los 3.605.402 parados registrados a finales de marzo, casi medio millón más que en diciembre de 2008. Paralelamente a este crecimiento, la afiliación a la Seguridad Social ha sufrido un descenso proporcional, aunque algo menor, desde los 18,3 hasta los 17,97 millones de afiliados. La práctica totalidad de los indicadores de actividad y clima económico (índices de producción industrial, de ventas del comercio minorista, de confianza del consumidor y empresarial) continúan experimentado descensos, más o menos acusados. Cabe destacar el continuado descenso en las cifras de venta de turismos que, en el primer trimestre han registrado un descenso del 43,1 % sobre el mismo período de 2008.
Por otro lado, el deterioro de las condiciones financieras de las empresas tiene su reflejo en el progresivo aumento de la morosidad bancaria que, en Febrero pasado superó el umbral del 4 %, y en el caso de las Cajas de Ahorro se acercó al 5 %. Crece también el número e importe total de los efectos de comercio impagados, y caen las cifras relativas a número y capital de las sociedades mercantiles constituidas.
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